En tu vida fui agua;
así recorrí tus labios, tu cintura
y después caí olvidado a tus pies.
Él, en cambio, es fuego;
cada instante tuyo que recorre
deja su huella inolvidable en tu vida.
En mi vida eres sed y cicatrices.
así recorrí tus labios, tu cintura
y después caí olvidado a tus pies.
Él, en cambio, es fuego;
cada instante tuyo que recorre
deja su huella inolvidable en tu vida.
En mi vida eres sed y cicatrices.
Marzo, 2002